"Glanzlichter 2013"

Kaixo a tod@s!!

Recuerdo haber leído hace ya bastante tiempo un pasaje que venía a decir algo así como que en toda montaña se encuentra a pequeña escala una miniatura que replica la forma exacta de esa misma montaña.

Durante un paseo otoñal esta hoja, que parecía haber leído también la historia, me llamó la atención entre el resto. En su pigmentación creí ver reflejada no sólo la estación en la que nos encontrábamos sino una representación cromática del ciclo anual completo del bosque de hayas. Quizás estaba demasiado cargado el café de aquella mañana… ;º)

"Four stations" Highlight en la categoría Nature as Art. Concurso Internacional Glanzlichter 2013. Bosque trasmocho de hayas (Fagus sylvatica) en Orozko, Parque Natural de Gorbeia. 5DII, 150 macro + 1.4X, f20, 20”, ISO200. Polarizador, trípode, retardo y espejo levantado. Si pincháis en la imagen se ve mayor y mejor. ;º)

El pedacito que contenía este abanico de color era bastante reducido de tamaño. Por ello, además del 150 macro que da una ampliación de 1:1 tuve que utilizar el multiplicador 1,4X para conseguir mayor acercamiento y, por lo tanto, no tener que recortar la imagen en exceso.

Coloqué el polarizador para eliminar brillos pero no era suficiente así que tuve que “tapar” bastantes brillos con el propio paraguas a modo de cúpula sobre la hoja. Esto último no me venía mal para resguardar el motivo de la propia lluvia que también podía moverlo.

 

Tanto la ampliación (resta luz), como el uso del multiplicador (resta un paso de luz), el uso del polarizador (quita otro paso y medio, más o menos) y el paraguas haciendo sombra incrementaban el tiempo de exposición. Si a esto sumamos el hecho de encontrarnos dentro del bosque y el de tener que cerrar el diafragma para conseguir suficiente profundidad de campo (f20) tenemos los motivos suficientes para una exposición tan prolongada; 20”.

Problemillas aparte, tengo que reconocer que la media docena de días que pude salir este otoño los disfruté especialmente. Bien es cierto que ha sido un otoño como pocos en cuanto a color y duración, por lo menos por estos lares. Y eso siempre es un aliciente.

Sea como fuere y lejos de premios y reconocimientos creo que las fotos conseguidas en estados de especial motivación tienen ese algo, esa “chispa”.

Aunque a veces podamos pensar que es éste un plato del que se disfruta en soledad, creo que esa chispa se propaga con facilidad y forma parte del potencial comunicativo de nuestras imágenes.

En mi caso particular, me  encantan estos bosques de hayas. Y aunque siempre digo lo mismo uno de mis propósitos no es más que el de intentar precisamente que esa chispa se propague. La conservación de estos preciosos lugares, esta vez, depende de que ese fuego se mantenga encendido.

Y otra vez más, un cachitín (esta vez sí que sí) de Orozko en un concurso internacional. AUPA OROZKO!!!